cartel del FANT.
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fanCULTURA
FANT XV: Festival de cine fantástico de Bilbao.
El 3 de mayo comienza la XV edición del ya veterano Festival de Cine Fantástico de Bilbao, que presenta siete películas en la sección oficial.
Otras secciones: Maestros del cine fantástico, El veneno del cine, Teaserland (falsos trailers), Sci World, Bilbao Grindhouse, Fanteskola, Fant en corto y el concurso de cortos y animación organizado por el portal Nontzeberri.
No perderse el documental sobre el impacto del cine de zombis de George A. Romero: “One for the FIRE: Night of the living Dead 40th Anniversary Documentary” (2008) de Robert Lucas y Chris Roe.
www.fantbilbao.net
“Déjame entrar”: vampiros a la europea.
Después del glamour fast food del vampirismo adolescente de “Crepúsculo”, llega a nuestras pantallas “Déjame entrar”, la película de Tomas Aldfredson protagonizada por vampiros infantiles. Frente al blandito y romanticón vampiro estadounidense con tupé, regresa el salvaje vampiro europeo, para devolvernos el mito trágico con lectura social añadida.
Esta excelente película representa un buen mordisco de calidad al género y supone la recuperación de la mirada nórdica del fantástico de “Vampyr” (1932) de Carl T. Dreyer o “Haxan” de Benjamín Christensen (1922), cuyos DVDs en edición especial acaban se salir al mercado.
Desde Bergman no nos había llegado un ramalazo de cultura sueca tan potente, encabezada por la narrativa negra de H. Mankell y Stieg Larsson, y que ahora tiene en esta cinta fantástica su confirmación: el alma de un vikingo atormentada por el rigor protestante y la soledad ártica es un magnífico motor creativo.
Miyazaki: artesanía a contracorriente.
El estreno de “Ponyo en el acantilado” del maestro Hayao Miyazaki es la mejor de las noticias para los aficionados al anime, y no solo para su legión de fans infantiles.
Nos devuelve la calidad del depurado dibujo de “Totoro”, pero con mayor movimiento: 185.000 dibujos frente a los 70.000 de “El viaje de Chihiro”. Una radical apuesta artesanal frente a la deriva digital de la animación japonesa o norteamericana. Pero no solo es una proeza artesanal a contracorriente, sino una maravilla de la imaginación humanista y ecológica del anime, identificado a menudo abusivamente con la violencia o la cacharrería futurista.
A sus 68 años el alma de los estudios Ghibli todavía ha de ofrecernos nuevas y terribles fábulas dibujadas a mano…
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